Español: (R)ECCESVINTHUS REX OFFERET es la frase formada por letras colgantes en esta corona votiva del siglo VII y de unos 21 cm de diámetro localizada en Guarrazar, un yacimiento visigodo de Toledo. El llamado tesoro de Guarrazar se encontró el 25 de agosto de 1858 por parte de Francisco Morales y María Pérez. Según su testimonio iban por un camino y vieron algo que brillaba entre unas losas, aparentemente descubiertas por una gran tormenta del día antes. El "tesoro" estaba formado por varias coronas (más de veinte), cruces, cálices y otros objetos de oro y gemas en una arqueta. Tras varias ventas clandestinas, un lote de piezas fue vendido al gobierno de Francia a principios de 1859. En 1941 se hizo un canje de obras que supuso la entrega a España de seis de las nueve coronas que integraban esta parte del conjunto. Actualmente se exponen en el Museo Arqueológico Nacional en Madrid. Un segundo conjunto se mantuvo oculto por otra familia durante más de dos años, durante los cuales llegaron a desmontar y vender más de tres cuartas partes de las piezas. En 1861 le entregaron a la reina Isabel II las pocas piezas que quedaban, entre las que estaba una corona ofrecida por el rey Suintila que fue robada en 1921 sin que se haya vuelto a saber de su paradero. Parte del texto anterior se ha tomado de www.guarrazar.com/ donde hay una extensa información sobre estas piezas.